En medio de la estepa manchega, muy lejos de las principales de Hispania, hubo una ciudad romana que derrochaba riqueza. Tanta que, pese a todo, aún nos deslumbra con su teatro y su anfiteatro. Segóbriga es uno de los hitos de nuestra arqueología, pero no se suele reparar en su bonito entorno natural, la encantadora Hoz del río Cigüela, en la que cualquier piedra podría ser del imperio. 14 km, dificultad media-baja.

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