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El recuerdo de la vegetación de la Isla de Pascua…

Desde que el ser humano colonizó la Isla de Pascua, la vegetación nativa ha sido una de las principales damnificadas. Numerosos procesos de deforestación, unidos con la plantación de especies alóctonas, fue resultando en un deterioro progresivo de la flora pascuense. Por eso, actualmente nos encontramos con una isla en la que el estrato arbóreo apenas se encuentra representado y el que existe se reduce exclusivamente a especies exóticas.

A pesar de ello, la isla sigue manteniendo viva la magia que emana de cada uno de sus rincones, materializada en los misteriosos Moais.

Los deseos de preservar la flora polinésica…

En el año 2009, Juan Carlos Poblete se propuso construir el primer jardín botánico privado de la isla. Para ello disponía de una parcela de 5.000 m2 y de un carácter emprendedor innato. Tras mucho trabajo, el creador del Jardín ha conseguido aunar más de 1.200 variedades de plantas procedentes de todo el mundo.

Aunque el objetivo del Jardín es el de reproducir y preservar la flora nativa de la Polinesia, la bondad del clima de la isla permite propagar diversas especies vegetales tropicales que completan la colección.El espacio está adornado con diferentes símbolos indígenas, como moais o esculturas dedicadas al dios Make Make o al Tangata Manu (hombre pájaro). Para el disfrute completo, el recorrido cuenta con diversos estanques y miradores.

Actualizado a fecha de Junio de 2014.